¿Cómo introducir un nuevo gato en la familia?

¿Estás pensando en introducir un nuevo gato en la familia? Te dejamos unos tips para que te asegures de que es la decisión correcta y, sobre todo, para hacer de su llegada algo lo más bonito posible.

Sabemos la emoción que produce tomar la decisión de ampliar la familia, pero ¿realmente es el momento? ¿En casa estáis todos de acuerdo? ¿Estáis preparados para una adaptación que puede ser más o menos sencilla? Veamos los aspectos importantes a la hora de adoptar a un nuevo gato.

Aspectos importantes para introducir un nuevo gato en la familia.

• Planificación: antes de tomar esta decisión todos los miembros humanos de la casa debéis estar de acuerdo, y es muy importante que se tengan en cuenta las necesidades de los miembros no humanos de la casa y sus características. 

Si un miembro de la familia no está de acuerdo o desconoce la llegada de un nuevo gato estamos ante el peligro del rechazo, y si ese animal no puede quedarse en casa ¿qué hacemos? Las “devoluciones” de animales son traumáticas, siempre que un gatito sale de un lugar para adaptarse a un nuevo hogar sufre y se estresa, juntar dos cambios (adopción y devolución) es aún peor y puede marcar a ese animal de por vida, dejándole traumatizado y con secuelas en su carácter y autoestima.

A la hora de tomar esta decisión también hay que contar con los animales con los que ya vivimos, si convives con un gatito anciano tal vez la idea de meter un cachorro debe ser desechada por que sus energías no van a concordar y podemos generar estrés al anciano y frustración al cachorro.

• Protocolo de presentación: ¿conoces la existencia de estos protocolos? si la respuesta es no, para aquí y corre a informarte. Te resumimos, siempre que llega un nuevo miembro al hogar debemos mantener a los animales separados en diferentes espacios (habitaciones), lo ideal es esperar a que el nuevo nos conozca, se relaje y se adapte a su espacio que será “su espacio seguro”, en el debe tener una cuevita, transportín o lugar en el que resguardarse, si es un dormitorio posiblemente se esconda bajo la cama o tras un mueble. Mientras os conocéis podéis intercambiar camitas o tejidos con los que los diferentes miembros tengan contacto para que se vayan “conociendo” a través de sus olores, que sepan que hay más gente en casa.

Los protocolos no son estándar, por que no todos los animales somos iguales ni nos comportamos igual, por lo que lo ideal es que si el gatito es adoptado la protectora os asesore si tienen experiencia, si no consultar a un etólogo veterinario especialista en comportamiento felino.

Si fallamos en la presentación podemos estar estropeando la convivencia de por vida, por lo que este momento es crucial.

• Presentación en persona: cuando veamos que todo el mundo está tranquilo en casa, tanto el nuevo como los anteriores habitantes podemos pasar a presentarles, y dejar que se vean. Siempre se recomienda que la primera vez que se vean sea con una barrera (una reja, una puerta para bebés, o en condiciones de seguridad para ambos animales).

Este primer contacto visual puede ser muy pacífico y agradable o puede estar llenito de bufidos, gritos, e incluso algún zarpazo, de ahí la importancia de la barrera.

• Supervisión: si el primer contacto visual no ha sido idílico, no pasa nada, es lo normal, hay que ir poco a poco y empatizar con la situación para ambos, podéis imaginar a vuestros compis diciendo “¿quién es esta persona con la que voy a tener que compartir a mis humanos, mis camas y mi comida?” y al nuevo gato pensando “¿a dónde me han traído y quién es esta gente?” 

La presentación en persona siempre debe hacerse bajo supervisión, en el momento en que se tuerza (aumento de la tensión o agresiones) cortaremos ese contacto y les separaremos de nuevo, que cada uno vuelva a su espacio seguro y bajen sus niveles de estrés. Si es posible podemos positivizar el encuentro con mimos o chuches, pero siempre valorad si es posible por el carácter de ellos, hay que estar muy atentos a su lenguaje corporal.

Si la presentación va bien, ambos respetan al otro y su espacio físico, si no hay agresiones o un elevado nivel de estrés, podemos mantener esa interacción pero siempre con supervisión, las primeras semanas siempre con vigilancia y cuando no estéis presentes mejor que estén separados para evitar sustos.

• Espacios seguros: siempre es recomendable que los animales tengan sus propios espacios, en las primeras semanas estos espacios deben poder separarse físicamente, a ser posible mediante puertas. Más adelante si la convivencia es positiva no debemos abandonar este concepto de intimidad y seguridad ofreciendo a cada animal su cama, su comedero, su bebedero y su arenero separados entre sí y de los de sus compañeros. 

De este modo nos aseguramos que no haya competencia para comer o beber, descansar o hacer sus deposiciones, en caso de problemas en la convivencia es posible que haya que aumentar el número de recursos o modificar las ubicaciones.

Otras cuestiones importantes a tener en cuenta a introducir un nuevo gato en casa.

Si detectais problemas en la convivencia consultar con una veterinaria etóloga cuanto antes puede ayudaros a detectar problemas de salud o a modificar la disposición de vuestro hogar para mejorar esa convivencia.

Recuerda que no hay dos animales iguales, que no hay un manual que nos sirva para todos y que formarnos y aprender sobre sus conductas es la única forma para entenderles, y que si una situación nos sobrepasa siempre podéis pedir ayuda a un profesional.

Si os decidís a aumentar la familia, recordad que siempre la mejor opción es la adopción. Adoptando salvas dos vidas: la vida del animal adoptado y la del animal que saldrá de la calle y ocupará su lugar en la protectora.