Artículos del Blog

¿Por qué muerde un gato?

Primero, tenemos que entender el comportamiento de los gatos, ya que aunque pensemos que son animales complejos y enigmáticos, cuyos comportamientos no parecen misteriosos e incluso desconcertantes a los humanos, siempre tienen un porqué.

Uno de los comportamientos que más “molestan” es morder. Aunque puede asustar e incluso ser doloroso, hay varias razones por las cuales un gato puede morder, y si entendemos el porqué lo hacen podremos mejorar la relación entre humanos y felinos.

1.- Juego y caza:

Una de las razones más comunes por las que un gato muerde es por juego. Los gatos son depredadores naturales, y el comportamiento de morder está profundamente arraigado en su instinto de caza. Los gatitos, especialmente, aprenden a morder y arañar durante el juego con sus compañeros de camada. Este juego simula las habilidades de caza que necesitarán como adultos. Incluso los gatos domésticos con los que convivimos conservan este instinto, y pueden morder como una forma de juego.

Para los familiares humanos, es importante diferenciar entre una mordida juguetona y una agresiva. Las mordidas de juego suelen ser suaves y no intencionadas para causar daño. Proveer juguetes apropiados y participar en juegos interactivos puede ayudar a canalizar esta energía de manera positiva.

En gatitos que no han socializado con su camada y que se ha incentivado esta forma de relacionarse puede ser una mordedura más dolorosa e impredecible, ya que de pequeños no han aprendido los límites sanos para relacionarse, y si no les enseñamos cuando parar podemos llegar a tener un problema.

2.- Defensa y miedo:

Los gatos también pueden morder por miedo o como una forma de defensa. Si un gato se siente amenazado, acorralado o estresado, es probable que recurra a morder como un mecanismo de defensa. Este tipo de comportamiento puede ser desencadenado por varios factores, como un entorno desconocido, la presencia de otros animales o personas, o situaciones que el gato percibe como peligrosas.

Para minimizar este comportamiento, es fundamental crear un ambiente seguro y predecible para el gato. Proveer escondites y refugios, así como respetar el espacio del gato, puede reducir el miedo y la necesidad de defenderse.

Si estamos en este caso, necesitamos saber leer las señales que el gato nos da cuando se está sintiendo mal frente a una situación y aprender a relacionarnos con ellos sin que lleguen a detonar y sentir que tienen que defenderse de una situación que consideran que les está poniendo en peligro. Si sabemos que algo le está incomodando lo ideal es que gestionemos el conflicto sin presionar, si no mediante el juego, con chuches o cambiando el ambiente, si esto no es posible podemos dejarles un espacio para que se tranquilicen y vean que no corren peligro.

3.- Dolor o enfermedad:

El dolor y la enfermedad también pueden provocar que un gato muerda. Si un gato siente dolor, puede morder como respuesta al malestar o como una forma de comunicar que algo anda mal. Las mordidas pueden ser una señal de que el gato tiene una condición médica que necesita atención.

Si un gato cambia su comportamiento y empieza a morder repentinamente, es aconsejable llevarlo al veterinario para una evaluación. Condiciones como problemas dentales, artritis o infecciones pueden causar dolor y llevar al comportamiento de morder.

Si muerden cuando les tocamos en una parte en concreto debemos sospechar que en esa zona pueden estar teniendo dolor y por ello tienen la necesidad de defenderse.

4.- Sobreestimulación:

La sobreestimulación es otra razón común por la cual los gatos muerden. A menudo, los gatos disfrutan de ser acariciados, pero hay un límite a la cantidad de estimulación que pueden tolerar. Una caricia prolongada puede provocar que un gato se sienta abrumado y responda mordiendo. 

Otro motivo por el que es importante aprender a leer el lenguaje corporal de un gato, y de ese modo evitar la sobreestimulación. Signos como el movimiento rápido de la cola, las orejas hacia atrás o un cambio en la postura pueden indicar que el gato ha tenido suficiente contacto físico. Respetar estos límites puede prevenir mordidas inesperadas.

5.- Comunicarse:

En algunos casos, los gatos muerden como una forma de comunicación. Pueden morder suavemente para llamar la atención o para señalar que quieren algo, como comida o juego. Este tipo de mordida suele ser más leve y menos dolorosa, pero es igualmente importante entender y responder adecuadamente a estas señales.

¿Cómo podemos manejar y prevenir que muerdan los gatos?

Manejar y prevenir las mordidas de gato requiere una comprensión de su lenguaje y de su pasado, ya que la socialización juega una parte muy importante en su forma de comunicarse. 

Os dejamos algunos consejos:

Juguetes: Proveer una variedad de juguetes puede ayudar a satisfacer los instintos de caza y juego del gato, reduciendo la probabilidad de que muerda a las personas.

Entorno seguro: Crear un ambiente seguro y enriquecedor puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad en los gatos, disminuyendo así las mordidas defensivas. Rascadores, feromonas y tiempo de calidad con ello bajará sus niveles de estrés reduciendo las posibilidades de que muerdan.

Revisiones veterinarias: Acudir al veterinario un mínimo de una vez al año asegura que cualquier problema de salud se detecte y trate a tiempo. En caso de que detectéis problemas acudid cuanto antes para reducir sus molestias y poner un tratamiento cuanto antes.

Socialización: Enseñar a los gatos a jugar de manera adecuada y establecer límites claros desde una edad temprana puede prevenir problemas de comportamiento en el futuro. Si son gatos adultos estamos a tiempo de mejorar nuestra relación con ellos.

Respetar los límites del gato: Aprender a leer el lenguaje corporal del gato y respetar sus límites es esencial para una convivencia armoniosa.

Acudir a un especialista: Si tenéis problemas para relacionados con vuestros compañeros felinos, si no entendéis porqué muerde o no sabéis manejar las situaciones es importante acudir a un especialista en conducta que os oriente para mejorar vuestra relación.

En resumen, entender por qué los gatos muerden es fundamental para cualquier familiar de felinos. Las mordidas pueden ser un comportamiento natural derivado del juego, una respuesta al miedo o al dolor, una reacción a la sobreestimulación, o una forma de comunicación. Con una atención cuidadosa y un enfoque respetuoso, es posible minimizar las mordidas y fomentar una relación saludable y feliz con nuestro amigo felino.

Leave a comment